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Lo manifestó al portal Debate Abierto, el Ingeniero Francisco Altamirano, presidente del Directorio de Termas Maria Grande S.A.
Altamirano espera poder contar con ayuda para reactivar las termas
Altamirano en declaraciones a este portal manifestó que “estos meses han sido muy duros, el turismo se ha visto afectado en forma más que sustancial, ciudades como María Grande promedian las 10 mil personas y esa misma cantidad de personas visitaban las termas. Pedimos audiencia para que nos atiendan en turismo de la provincia, la reunión se formalizó el 17 de Marzo, fuimos porque no teníamos una ley de cierre forzoso en el caso de Termas María Grande hicimos un cierre forzoso el 18 de marzo porque ya no se podía trabajar más, en la planta de empleados quedó solamente la gente de vigilancia y un administrativo. El complejo posee 190 cabañas que hay que administrar, y sus 42 hectáreas, contamos con dos accesos, vigilancia todos los días y había que cumplir ciertos requisitos. Se suspendió la planta de personal excepto la gente de vigilancia, la otra parte de los trabajadores actualmente cobran el ATP, el 50% de sus salarios, la actividad del turismo está prohibida y no se cuenta con otro ingreso económico”.
Asimismo indicó que “se anunciaron ayudas pero ninguna se concretó, planes de ayuda de financiamiento con tasas del 24% de entidades bancarias, ninguna de las dos instituciones de Maria Grande nos ayudó, hubo anuncios pero nada pudimos recibir. Los complejos turísticos ninguno pudo acceder a ese beneficio, y al no haber certezas Termas Maria Grande fue la que optó por el cierre forzoso y por la ley de trabajo”.
De igual modo agregó a Debate Abierto que “pedimos la intervención del ente regulador de aguas termales y se llegó a una congruencia. Hubo una charla con personas entendidas y ahí se dijo que no se podía hacer siete veces clorificación, el agua de termas se vende como agua saludable. Esto ha sido tan cambiante, tenemos la expectativa, las ganas, hoy hay una propuesta de trabajar con un 30% de los turistas, pero ése no es el desarrollo de las termas, está fuera de foco esa idea, vamos a tener que cambiar las formas de trabajo, capacitar a los empleados, seleccionar a quienes pueden estar por una cuestión sanitaria, la realidad es que hay muchas preguntas sin respuestas y el horizonte no es claro”.
“Desde que se reactivó la construcción, seguimos con las cabañas, se ha invertido en eso, y en lo que es el complejo, en piletas se hace funcionar el bombeo, se mantiene la parte parquizada, pero para arrancar habrá que hacer una fuerte inversión, no solo en infraestructura sino también en capacitación del personal, por lo que espero que el gobierno haga efectivo todo lo que se ha dicho. Hay que armar una Mesa de Dialogo y tener en cuenta que más allá que tenemos eventos, como fiestas, la gente que entra a Entre Ríos es por el termalismo. Y con esta situación los complejos estamos mudando el turismo recreativo al turismo de salud”, concluyó Altamirano. (Fuente: Debate Abierto)
“Hay muchas preguntas sin respuestas y el horizonte no es claro”
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Lo manifestó al portal Debate Abierto, el Ingeniero Francisco Altamirano, presidente del Directorio de Termas Maria Grande S.A.
Altamirano espera poder contar con ayuda para reactivar las termas
Altamirano en declaraciones a este portal manifestó que “estos meses han sido muy duros, el turismo se ha visto afectado en forma más que sustancial, ciudades como María Grande promedian las 10 mil personas y esa misma cantidad de personas visitaban las termas. Pedimos audiencia para que nos atiendan en turismo de la provincia, la reunión se formalizó el 17 de Marzo, fuimos porque no teníamos una ley de cierre forzoso en el caso de Termas María Grande hicimos un cierre forzoso el 18 de marzo porque ya no se podía trabajar más, en la planta de empleados quedó solamente la gente de vigilancia y un administrativo. El complejo posee 190 cabañas que hay que administrar, y sus 42 hectáreas, contamos con dos accesos, vigilancia todos los días y había que cumplir ciertos requisitos. Se suspendió la planta de personal excepto la gente de vigilancia, la otra parte de los trabajadores actualmente cobran el ATP, el 50% de sus salarios, la actividad del turismo está prohibida y no se cuenta con otro ingreso económico”.
Asimismo indicó que “se anunciaron ayudas pero ninguna se concretó, planes de ayuda de financiamiento con tasas del 24% de entidades bancarias, ninguna de las dos instituciones de Maria Grande nos ayudó, hubo anuncios pero nada pudimos recibir. Los complejos turísticos ninguno pudo acceder a ese beneficio, y al no haber certezas Termas Maria Grande fue la que optó por el cierre forzoso y por la ley de trabajo”.
De igual modo agregó a Debate Abierto que “pedimos la intervención del ente regulador de aguas termales y se llegó a una congruencia. Hubo una charla con personas entendidas y ahí se dijo que no se podía hacer siete veces clorificación, el agua de termas se vende como agua saludable. Esto ha sido tan cambiante, tenemos la expectativa, las ganas, hoy hay una propuesta de trabajar con un 30% de los turistas, pero ése no es el desarrollo de las termas, está fuera de foco esa idea, vamos a tener que cambiar las formas de trabajo, capacitar a los empleados, seleccionar a quienes pueden estar por una cuestión sanitaria, la realidad es que hay muchas preguntas sin respuestas y el horizonte no es claro”.
“Desde que se reactivó la construcción, seguimos con las cabañas, se ha invertido en eso, y en lo que es el complejo, en piletas se hace funcionar el bombeo, se mantiene la parte parquizada, pero para arrancar habrá que hacer una fuerte inversión, no solo en infraestructura sino también en capacitación del personal, por lo que espero que el gobierno haga efectivo todo lo que se ha dicho. Hay que armar una Mesa de Dialogo y tener en cuenta que más allá que tenemos eventos, como fiestas, la gente que entra a Entre Ríos es por el termalismo. Y con esta situación los complejos estamos mudando el turismo recreativo al turismo de salud”, concluyó Altamirano. (Fuente: Debate Abierto)