El licenciado en Ciencias Políticas dejó interrogantes acerca de lo que puede suceder en las elecciones de octubre. Algunos números.
¿Todos ganan?
El 2016 fue un año que políticamente desafió la intuición y juicio de la mayoría de los analistas. Todo era novedoso en nuestras tierras. Salvo por Varisco en la ciudad, estábamos en un escenario donde nuestro Gobernador y nuestro Presidente debían construir gobernabilidad en tierra poco firme, y asimismo dar legitimidad a las ajustadas victorias que cada uno tuvo en sus respectivas elecciones. Si a ello le sumamos que tenemos el primer Presidente proveniente de una tercera fuerza y un Ministro Nacional de mucho peso poniendo fichas en nuestra provincia tenemos algo que puede definirse como “inédito”. Todos esperaron el divorcio de Bordet con Urribarri, no pasó; muchos esperaron una oposición más dura desde Casa Gris a Casa Rosada, no sucedió; pasado el tiempo también se rumoreaba una ruptura local del PJ, la renovación de autoridades dio por tierra con ello y así pasó el año, sin mayores sobresaltos y la grieta fue deglutida por una nueva era de “paz y cooperación” entre Nación, Provincia y Municipio.
Hablando en términos políticos, sea aclarado ello a quien lee, las expectativas fueron muchas y en gran medida tanto Bordet como Macri cumplieron. Paradójicamente quien no debía construir legitimidad, Varisco, es el que peor está en cuanto a nivel de aprobación de gobierno, 30 puntos debajo de Bordet y unos 20 debajo de Macri, aproximadamente.
En este contexto se nos hace a los colegas todo el tiempo la gran pregunta “che, ¿quién va a ganar las elecciones?”. Por parte de quien escribe la respuesta es siempre la misma: falta una eternidad. La ciencia política no se trata de una esfera de cristal que predice el futuro, pero sí nos da un conjunto de herramientas para describir y evaluar escenarios posibles para esta elección de medio término. Repasemos algunos elementos que dibujan el actual estado de las situaciones:
1. Si el 2017 fuera una partida de ajedrez, las piezas blancas las tiene el PRO. Con un nivel de aprobación que promedia 53% (IPSOS-MyA), evaluará en qué medida convendrá o no nacionalizar o provincializar las elecciones.
2. Dato polémico. “A nadie le interesan las elecciones intermedias” me dijo Jaime Durán Barba en enero de 2016, contrariando las visiones plebiscitarias de las mismas ¿cuántos en Balcarce 50 pensarán lo mismo?
3. Un enigma llamado Gustavo Bordet. El presidente provincial del PJ ¿habilitará la interna, decidirá todo él? ¿Se apoyará en sondeos? ¿Utilizará a alguien del gabinete? Muchas preguntas, pocas certezas.
4. Busti pide pista. El exgobernador pide condiciones para volver para el PJ, con el tiempo esa opción parece alejarse. Sin embargo será un factor determinante para el resultado de cuantos diputados se llevará cada quién.
5. El rumor: Frigerio bajando a competir. Poco probable pero alteraría significativamente la pugna electoral.
6. Sin estrellas en el firmamento. Descontando Busti y Frigerio, a poco más de dos meses del cierre de listas no hay nombres estelares dando vuelta en el microclima político. Sin nombres rutilantes, toda especulación sobre quienes encabezarán las listas se vuelve fútil.
7. El kirchnerismo residual parece no tener espacio en Entre Ríos. Aquellos que sostienen un discurso más aguerrido contra la administración de Macri han sido desacreditados una y otra vez y parecen ser cada vez menos en nuestra provincia.
En suma, el panorama está abierto, mucho queda por recorrer hasta la jura de los nuevos diputados en diciembre. Aun así, y a falta de la bola de cristal, podemos hacer un ejercicio de proyección de resultados qué sólo es válido tomando la información actual. Tenemos cinco bancas en juego que se renovarán en diciembre próximo: tres del PJ, una de la UCR y otra del Frente Renovador. Si de inferir un resultado se tratara, sólo tenemos números parciales de aprobación gubernamental y la historia electoral del distrito. Con esos datos, el resultado sería de dos diputados para el PJ, dos para Cambiemos y uno para el Frente Renovador (supeditado a la permanencia de Busti en ésa fuerza).
Muchos dirán que ganador hay uno sólo y es quién salga primero. Rudimentaria mentira, dado que todo es más relativo si hablamos de cargos legislativos. Entonces ¿por qué todos ganarían? Porque las cuotas de poder de los principales actores se ven aumentadas: Cambiemos aumentaría su número de diputados de este distrito, Bordet desplaza a tres integrantes de la “estudiantina” con posibilidad de conseguir diputados más leales a su administración y Busti podría mantener la banca que le responde (o bien no participar y demostrar que el Frente Renovador sin él no funciona).
“En marzo comienza el año”, suelen decir los padres que tienen sus hijos en edad escolar. Lo mismo podemos decir de la política local, el juego está en marcha y las pujas internas se hacen notar en cada diario, portal y agencia de noticias. Dentro de cada fuerza electoral está la puja, resta por saber si luego de agosto y octubre volverá a reinar la paz y cooperación que oímos seguido en los discursos de nuestros gobernantes.
De Paraná. Es licenciado en Ciencias Políticas, egresado de la Universidad Nacional de Rosario. Tiene un doctorado y es Becario Doctoral en el Conicet.
Politólogo de Paraná analiza los escenarios posibles en Entre Ríos
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El licenciado en Ciencias Políticas dejó interrogantes acerca de lo que puede suceder en las elecciones de octubre. Algunos números.
Elecciones 2017.
El 2016 fue un año que políticamente desafió la intuición y juicio de la mayoría de los analistas. Todo era novedoso en nuestras tierras. Salvo por Varisco en la ciudad, estábamos en un escenario donde nuestro Gobernador y nuestro Presidente debían construir gobernabilidad en tierra poco firme, y asimismo dar legitimidad a las ajustadas victorias que cada uno tuvo en sus respectivas elecciones. Si a ello le sumamos que tenemos el primer Presidente proveniente de una tercera fuerza y un Ministro Nacional de mucho peso poniendo fichas en nuestra provincia tenemos algo que puede definirse como “inédito”. Todos esperaron el divorcio de Bordet con Urribarri, no pasó; muchos esperaron una oposición más dura desde Casa Gris a Casa Rosada, no sucedió; pasado el tiempo también se rumoreaba una ruptura local del PJ, la renovación de autoridades dio por tierra con ello y así pasó el año, sin mayores sobresaltos y la grieta fue deglutida por una nueva era de “paz y cooperación” entre Nación, Provincia y Municipio.
Hablando en términos políticos, sea aclarado ello a quien lee, las expectativas fueron muchas y en gran medida tanto Bordet como Macri cumplieron. Paradójicamente quien no debía construir legitimidad, Varisco, es el que peor está en cuanto a nivel de aprobación de gobierno, 30 puntos debajo de Bordet y unos 20 debajo de Macri, aproximadamente.
En este contexto se nos hace a los colegas todo el tiempo la gran pregunta “che, ¿quién va a ganar las elecciones?”. Por parte de quien escribe la respuesta es siempre la misma: falta una eternidad. La ciencia política no se trata de una esfera de cristal que predice el futuro, pero sí nos da un conjunto de herramientas para describir y evaluar escenarios posibles para esta elección de medio término. Repasemos algunos elementos que dibujan el actual estado de las situaciones:
1. Si el 2017 fuera una partida de ajedrez, las piezas blancas las tiene el PRO. Con un nivel de aprobación que promedia 53% (IPSOS-MyA), evaluará en qué medida convendrá o no nacionalizar o provincializar las elecciones.
2. Dato polémico. “A nadie le interesan las elecciones intermedias” me dijo Jaime Durán Barba en enero de 2016, contrariando las visiones plebiscitarias de las mismas ¿cuántos en Balcarce 50 pensarán lo mismo?
3. Un enigma llamado Gustavo Bordet. El presidente provincial del PJ ¿habilitará la interna, decidirá todo él? ¿Se apoyará en sondeos? ¿Utilizará a alguien del gabinete? Muchas preguntas, pocas certezas.
4. Busti pide pista. El exgobernador pide condiciones para volver para el PJ, con el tiempo esa opción parece alejarse. Sin embargo será un factor determinante para el resultado de cuantos diputados se llevará cada quién.
5. El rumor: Frigerio bajando a competir. Poco probable pero alteraría significativamente la pugna electoral.
6. Sin estrellas en el firmamento. Descontando Busti y Frigerio, a poco más de dos meses del cierre de listas no hay nombres estelares dando vuelta en el microclima político. Sin nombres rutilantes, toda especulación sobre quienes encabezarán las listas se vuelve fútil.
7. El kirchnerismo residual parece no tener espacio en Entre Ríos. Aquellos que sostienen un discurso más aguerrido contra la administración de Macri han sido desacreditados una y otra vez y parecen ser cada vez menos en nuestra provincia.
En suma, el panorama está abierto, mucho queda por recorrer hasta la jura de los nuevos diputados en diciembre. Aun así, y a falta de la bola de cristal, podemos hacer un ejercicio de proyección de resultados qué sólo es válido tomando la información actual. Tenemos cinco bancas en juego que se renovarán en diciembre próximo: tres del PJ, una de la UCR y otra del Frente Renovador. Si de inferir un resultado se tratara, sólo tenemos números parciales de aprobación gubernamental y la historia electoral del distrito. Con esos datos, el resultado sería de dos diputados para el PJ, dos para Cambiemos y uno para el Frente Renovador (supeditado a la permanencia de Busti en ésa fuerza).
Muchos dirán que ganador hay uno sólo y es quién salga primero. Rudimentaria mentira, dado que todo es más relativo si hablamos de cargos legislativos. Entonces ¿por qué todos ganarían? Porque las cuotas de poder de los principales actores se ven aumentadas: Cambiemos aumentaría su número de diputados de este distrito, Bordet desplaza a tres integrantes de la “estudiantina” con posibilidad de conseguir diputados más leales a su administración y Busti podría mantener la banca que le responde (o bien no participar y demostrar que el Frente Renovador sin él no funciona).
“En marzo comienza el año”, suelen decir los padres que tienen sus hijos en edad escolar. Lo mismo podemos decir de la política local, el juego está en marcha y las pujas internas se hacen notar en cada diario, portal y agencia de noticias. Dentro de cada fuerza electoral está la puja, resta por saber si luego de agosto y octubre volverá a reinar la paz y cooperación que oímos seguido en los discursos de nuestros gobernantes.
De Paraná. Es licenciado en Ciencias Políticas, egresado de la Universidad Nacional de Rosario. Tiene un doctorado y es Becario Doctoral en el Conicet.