Posicionamiento frente a la causa López

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*Por Gastón Grand

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Desde Potencia Peronista, en virtud de los últimos acontecimientos que han venido tomando estado público en la nación y en algunas provincias, que cobran su punto máximo de irritación social en la detención del ex vice ministro José López, en ocasión de transportar una abultada suma de dinero, queremos realizar una reflexión al respecto. Expresamos nuestro más contundente repudio a todo acto de corrupción.

Manifestamos nuestra enorme preocupación en cuanto al daño y crisis institucional que esto conlleva en la consideración de la ciudadanía en general. Esta situación, en primer lugar, cuestiona al sistema democrático, ya que el mal funcionamiento de los tres poderes pareciera no poder garantizar la plena vigencia de los valores que le dan origen. Asimismo, cuestiona a la política y a los políticos, en cuanto al descrédito generalizado que instala en la sociedad; y ensucia particularmente, a nuestro partido, en cuanto establece la enorme contradicción de predicar sensibilidad por los sectores más humildes, al tiempo que desvía los recursos públicos que los tiene como destinatarios. Todo ello precipita la necesidad de muchas horas de debate, tan prometidas como dilatadas en el tiempo.

No tenemos dudas de que tanto con el caso de López como el Báez, se intentan ocultar políticas que lleva adelante el gobierno de Macri, que hambrean al pueblo, acompañado por una vil jugada por parte de los grandes medios de comunicación, acorde a dicho ocultamiento. Pero no creemos que ese planteo sume al debate en cuestión, dado que por el momento parece intentar justificar lo injustificable.

Nos negamos también al planteo de que “los peronistas” debamos hacernos  cargo, así sin más, de las acciones de corruptos que con total descaro dicen ser peronistas y estar cerca del pueblo. Esas personas nos han traicionado a nosotros más que a nadie, se llenaron la boca repudiando la pobreza, mientras se cargaban los bolsillos con lo que había para combatirla; se sirvieron de nuestro partido, por su amplia raigambre popular, para – justamente- quedarse con lo que debiera haberse destinado a esos sectores.

La corrupción no tiene banderas políticas y la realidad parece indicar que cuando alguien llega al poder, el control es el primer “obstáculo” a sortear. Porque como dijo Juan D. Perón,  “el hombre es bueno, pero si se lo vigila es mejor”. Control que solo es molesto para aquellos que entienden que el poder se ejerce de forma hegemónica, verticalista y que una vez alcanzado, convierte al gobernante en un monarca.

Se relega lo republicano y democrático que según nuestra constitución debe ser el gobierno, se frena el carácter movimientista que los peronistas promovemos y se transforma en cerrado,  conservador y oligárquico.

Desde nuestra lógica, existen otros modos de ejercer el poder, y es lo que hemos venido proponiendo desde hace tiempo: lo que nos empodera no es la centralización sino la circulación del poder. De eso se trata un gobierno abierto.

Está claro que el gobierno va a usar lo de López todo lo que pueda para acallar los gritos de la realidad, una realidad que también lo tiene al propio presidente en la mira de la corrupción, y a muchos de sus ministros.  Esto les sirve para ocultar una política de ajuste hacia los trabajadores, y les da tiempo para reorientar miles de millones hacia los sectores más acomodados, para dar impunidad a los que fugan capitales y empobrecen al conjunto, mientras se repite hasta el hartazgo la imagen de José López.

Nosotros somos peronistas y defendemos la justicia social. El que se queda con lo que el Estado tiene que redistribuir, debe ser juzgado y repudiado por el pueblo. Es necesario que empecemos a exigir una ética de la acción política. La política sin una ética que la guíe pierde la brújula. Es como en la novela de Tolkien, no cualquiera está preparado para el poder, por eso es tan necesario el control desde la participación activa.

Son tiempos complejos y angustiantes, pero la  salida a esta coyuntura, sin dudas, sigue siendo más democracia, con más participación, y más política.

*Ex viceintendente de Paraná (PJ)