Por una Argentina Republicana, Democrática y Federal

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*Por Juan Carlos Lucio Godoy

GODOY ANTEOJOS

Vivimos una sucesión de hechos trascendentes e históricos para la democracia argentina. El funcionamiento de la República ha permitido, con su división de poderes y contrapesos, poner límites concretos a los abusos del poder.

El fallo, de la Sala I de la Cámara en lo Contencioso y Administrativo de Tucumán, que dispuso la nulidad de los comicios celebrados el 23 de agosto pasado, es contundente en objetar la falta de independencia y transparencia con la que actuaron los actuales gobernantes provinciales.

De la manera más burda posible, el oficialismo tucumano, mediante quema de urnas, cambio de telegramas, compra de votos, urnas abiertas con más votos que votantes y el supuesto corte de luz que destruye las grabaciones fílmicas de las urnas durante el día en que estuvieron guardadas, llevó el fraude a niveles desconocidos en nuestra democracia.

Por otro lado se excusan de que “el porcentaje de irregularidades es bajo”, como si fuera un argumento sustentable. El solo hecho de reconocerlo hace ilegal el proceso y anulable por cierto. No es cuestión de magnitudes sino de conductas. La indecencia no tiene medida. Se es decente o no se lo es, y quien debe demostrarlo es el funcionario público no el pueblo que es quien manda.

Nunca, desde 1983, la Justicia anuló ninguna elección, aun cuando hubo denuncias de fraude. El caso de Tucumán se cierra como el paroxismo de mecanismos para-institucionales que violentan de manera sustantiva el ejercicio pleno, confiable y transparente del acto democrático por excelencia, la voluntad popular y su custodia.

No es Republicano mal utilizar los institutos electorales buscando el perjuicio del adversario. Eso es especulación y abuso de poder, pero también demuestra debilidad absoluta. Inseguridad, búsqueda de ventajas para un beneficio sectorial pero nunca popular.

El fallo de la justicia tucumana demuestra que ha habido alteraciones y manipulaciones insalvables. Al pueblo se lo denosta y agrede con estas actitudes. Solo una nueva elección, con todas las garantías de legitimidad podrá llevar paz y certeza al pueblo tucumano después de esta ejemplar sentencia.

*Candidato a vicegobernador por Cambiemos Entre Ríos