La Impunidad Avanza

Leido 137 veces

Desde el Consejo Departamental del Partido Justicialista Paraná Campaña queremos expresar nuestro más enérgico repudio y rechazo a la vergonzosa reunión organizada por el Legislador Nacional por la provincia de Entre Ríos Beltrán Benedit junto a otros pares de la bancada de la Libertad Avanza, visitando a condenados por delitos de Lesa Humanidad, crímenes cometidos durante la ultima dictadura cívico militar, encontrándose dentro de ellos el despreciable y cobarde Alfredo Astiz.
pj
Astiz, tristemente recordado, canallesca participación en nuestra historia. Astiz se infiltró entre madres, familiares que buscaban a sus seres queridos, era uno más, “buscaba a su hermano”, pero en realidad su función fue pasar información que permitiera organizar el secuestro, tortura y desaparición de doce personas que se reunirían en la Iglesia de la Santa Cruz entre el 8 y 10 de diciembre de 1977. Entre ellos, estaban las Madres de Plaza de Mayo Azucena Villaflor, María Eugenia Ponce de Bianco y Esther Ballestrino de Careaga, así como las monjas francesas Alice Domon y Leonie Duquet junto con otros familiares y amigos. Los doce fueron llevados a la ESMA y arrojados al mar en un vuelo de la muerte el 14 de diciembre de 1977. El ex oficial de la Marina tiene dos condenas a prisión perpetua por los crímenes cometidos en la ESMA.
Los vuelos de la muerte consistían en arrojar personas desde los aviones militares. En este proceso las víctimas eran inyectadas con pentotal sódico aduciendo ser una vacuna y arrojadas vivas, semi desnudas y en estado de somnolencia, cuerpo adormecidos pero lucidos y consientes, sobre el mar o el Río de la Plata; incluso nuevas investigaciones también relatan casos en cercanías de Villa Paranacito, con el fin de hacer desaparecer los cadáveres y las pruebas de los crímenes.
Benedit y su troupe maquillan con palabras y eufenismos, lo que lisa y llanamente es una conducta negacionista del genocidio, militando por la libertad de las bestias que nos llenaron y nos llenan de sangre, dolor y horror.
Como integrantes de la conducción de un partido que muchos de sus hombres y mujeres fueron victimas directas de estas calamidades humanas, tenemos la obligación de repudiar este hecho en defensa de la democracia y de las verdaderas libertades.
Es muy grave que un grupo de legisladores ejerzan tan burda defensa de los represores y genocidas condenados en múltiples instancias, siempre bajo las garantías del derecho en juicio, instancia que ellos no les dieron a sus víctimas. Y para ser claros en lo que pensamos el Diputado Nacional por nuestra provincia Benedit, pretende tratar como mártires a delincuentes y asesinos condenados con sentencia firme. Asesinos que no se arrepienten de las aberraciones cometidas, pues su silencio no es más que una clara manifestación de que su conciencia no reconocen lo siniestro de su accionar, no hay remordimiento, no hay culpa, solo hay satisfacción.
Finalmente queremos decir, es que actitudes como estas lo único que hacen es debilitar nuestra democracia y sus instituciones, habilitando discursos y acciones de odio, dejando a la justicia en segundo plano, donde el poder ocasional que te da ser diputado de una provincia hace que personas como Benedit crean que sus pensamientos están por encima de la misma; estos son actos que ponen en jaque la república y las libertades que se dicen defender.(Fuente: PJ Paraná Campaña)