Angelina Hillairet, desde Cerrito hasta el corazón de Núñez

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Angelina Hillairet, jugadora surgida en Unión Agrarios, a los 18 años se incorporó al plantel de River Plate, donde participará del Torneo Metropolitano.

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De jugar en el club de su pequeña ciudad natal a vestir la camiseta de una de las instituciones deportivas más grandes de Latinoamérica. Con el claro objetivo de crecer en el mundo del deporte, la cerritense Angelina Hillairet dejó la comodidad de su hogar y se mudó a Buenos Aires en 2022, donde se sumó a las filas del Club Banco Nación para jugar al hockey sobre césped, disciplina que empezó a practicar a los ocho años en el Club Unión Agrarios Cerrito tras jugar previamente al vóley y al tenis, además de realizar danzas folclóricas de manera paralela.

Su desempeño fue más que satisfactorio y, tras dos años en esa institución, le surgió la posibilidad de incorporarse a River Plate –el club del que es hincha–, donde se encuentra realizando su primera pretemporada.

UNO se comunicó con la jugadora de 18 años, que se desempeña como mediocampista ofensiva o delantera, quien contó cómo se dio su llegada al Millonario.

—¿Cómo se te dio la posibilidad de llegar a River?

—Siempre tuve la idea de crecer en el deporte y mejorar día a día. En un momento hice un click y les dije a mis viejos “para seguir progresando me tendré que ir a jugar el torneo Metropolitano cuando sea más grande”. Habré tenido unos 12 años. En 2022 vine a una prueba a dos clubes, Gimnasia y Esgrima de Buenos Aires y Banco Nación, y tuve la posibilidad de quedar en ambos, por lo que tuve que decidirme y elegí Banco Nación. Es un club súper lindo, con el cual estoy súper agradecida. Este año por varias circunstancias y elecciones personales tomé la decisión de hacer un cambio. A través de la gente de Outliers, el centro de entrenamiento en el me preparo en Buenos Aires, se me dio la posibilidad de ir a probarme a dos clubes: Vélez y River. Quedé en ambos y otra vez tuve que elegir. Fue realmente una locura porque en River había un solo cupo y que me hayan elegido fue un sueño para mí, ya que soy hincha.

—¿Con qué te encontraste cuando llegaste a una institución tan grande?

—Es una locura y no tiene descripción. No me detengo a pensar lo que me ha tocado vivir porque una vez me dijeron que cuando llegan estas oportunidades tienen que ser un trampolín para despegar y no un sillón donde ponerse cómodo y estancarse. Entonces cuando se me dio la llegada a River al toque me sumé a entrenar para prepararme para mis próximos objetivos. Nunca me detuve a pensar en lo que me estaba pasando. Si en estos momentos me pongo a reflexionar y a imaginar que si a los ocho años, cuando empecé a jugar hockey, me hubieran dicho que a los 18 iba a estar jugando en River hubiera pensado que era una locura que fuese verdad. El club es tremendo y estar jugando junto a quienes eran mis ídolas desde chiquita, como Luchi Von Der Heyde por mencionar alguna, charlar y compartir con ellas es algo que me enriquece y me llena muchísimo. Me hace pensar que valió la pena todo el esfuerzo que realizamos junto con mi familia, que me apoyó en todo momento. Es un proceso muy lindo el que estoy viviendo y me ayuda a crecer tanto en lo deportivo como en lo personal. Cuando me enteré que tenía el pase para sumarme a River, el hecho de haberlo compartido inmediatamente con mi familia fue uno de los momentos más lindos de mi vida, el cual va a ser un recuerdo que me va a quedar para siempre. Mi familia me acompaña y está en todo momento, y no habrá nada que me alcance para devolverle todo lo que me dieron.

—¿Cómo fueron tus primeros días con la camiseta de River?

—Mientras seguimos de pretemporada el sábado tuvimos un torneo, que fue la Copa Club Italiano, donde pude debutar con esta camiseta. Fue realmente muy lindo. En el hockey existe el plantel superior, el cual se compone por los equipos de Intermedia y Primera. Como a la mayoría de las jugadoras que recién llegan, me tocó formar parte del equipo de Inter, que vendría a ser lo que en fútbol es la Reserva. De todos modos es muy dinámico ya que el equipo no es fijo y las jugadoras tenemos que ganarnos nuestro lugar en la Primera. Fuimos campeonas, lo cual significó una alegría muy grande para mí y el equipo. El torneo Metropolitano comenzaría el 16 de marzo, por lo que seguimos con los trabajos de pretemporada, que es durísima desde las prácticas hasta los amistosos.

Prensa Hockey River

—¿Fue muy grande el cambio deportivo que viviste en estos dos años, ya sean en los aspectos físicos, tácticos o técnicos?

—Fue muy diferente a lo que estaba acostumbrada y en cada escalón fue aumentando la exigencia. Todo suma para crecer y es lo que me motiva para seguir día a día. Me ayuda muchísimo el trabajo que realizo en Outliers, como así también la preparación que hice en Cerrito en el gimnasio HIT de Andrés Catelani, mi entrenador de toda la vida, donde me mantuve entrenándome antes de venir a Buenos Aires a empezar la pretemporada. Ese trabajo me preparó y me sigue preparando para estar lista para estos cambios de exigencias, con entrenamientos que son súper duros. Cada cambio de club significó un crecimiento en la demanda tanto táctica, física y técnica. Por suerte pude tomar cosas nuevas todos los días, lo que me permite mejorar.

—¿Cuáles son los objetivos para esta etapa de tu carrera?

—Como siempre quiero ir mejorando y creciendo día a día. Adaptarme al club y al equipo, entendiendo el sistema táctico que nos piden los entrenadores y encajar cada vez mejor en el grupo. Mi primera meta será poder debutar en la Primera en el torneo Metropolitano.

—Por último…¿cómo te adaptaste al cambio de vivir en Cerrito a Buenos Aires?

—Fue un cambio súper pero súper grande. Acostumbrada a hacer dos o tres cuadras caminando para llegar a la cancha y conocer a todo el mundo, a tener que tomarme colectivos o trenes para ir a entrenar o al colegio. Tuve que adaptarme a muchas cosas, sobre todo a los tiempos. Pero lo fui logrando y encontré personas que me ayudaron a sobrellevar las dificultades, lo cual es un lujo. Estar en contacto permanente con mi familia y amigas, y poder irme algunos fines de semana, son cosas que me empujan a seguir.(Fuente: Diario Uno)