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Como presidente del PJ Entre Ríos, Gustavo Bordet negó el planteo de un sector del partido que pedía postergar los comicios internos de autoridades previstos para el 10 de marzo. Alegó factores legales que implicarían “severas sanciones” para el peronismo entrerriano.

Bordet justificó su rechazo al requerimiento en que las postergaciones que se habían producido durante el año pasado llevaron la situación a un punto de no retorno.
“Tuvimos advertencias para regularizar la situación por lo que se concretó un cronograma electoral finalizando el 10 de Marzo 2024, y existía la posibilidad de retomar el cronograma suspendido en 2023 (que ya estaba en la etapa de presentación de listas) por lo que propuse, a los efectos de posibilitar las tareas de afiliaciones y de organización de la militancia, empezar un nuevo cronograma el cual fue comunicado formalmente a la justicia electoral”, indicó el ex mandatario en la misiva.
“Debo informarles – agregó – que nuestra situación institucional requiere de una rápida regularización de acuerdo a las normas legales vigentes. Merece destacarse como muy importante que el incumplimiento de este proceso electoral interno en marcha y comunicado a la justicia electoral implicaría severas sanciones”, agregó.
Antes, Bordet recordó que el mandato de las autoridades electas en junio de 2016 fue prorrogada en 2020 en medio de la pandemia por un Congreso partidario. Y que en 2023 hubo una advertencia de la Justicia Electoral para que se regularice la situación.
Esto llevó a que, inicialmente, se planteara un cronograma electoral que comenzaba en abril y terminaba en junio, coincidiendo con el de las elecciones primarias nacionales y provinciales.
Hubo entonces una postergación a noviembre. Pero la segunda vuelta electoral “complicó las posibilidades de concretarlas”, señaló Bordet. Fue así que se llegó al actual esquema.
El pedido de postergación había sido hecha por un grupo de la dirigencia peronista.

(Fuente: APFDigital)