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Se trata del arroyo Burgos, ubicado entre la zona de María Grande Segundo y Mojones Sur. “Es un arroyo que siempre fue muy caudaloso, era una fuente natural para los animales, en 30 años nunca vimos algo así”, dijo un productor.
Maria Grande.
La escasez de lluvias que castiga a gran parte del territorio argentino, desde hace al menos dos años, se agravó en los últimos meses. En Entre Ríos la prolongada sequía, causa una innumerable cantidad de perjuicio al sector agrícola. Sembrados que se secaron por falta de precipitaciones, escasez de pasturas para los animales y falta de agua en cursos naturales.
En la zona de María Grande Segundo y Mojones Sur, en el departamento Paraná, se secó por completo un caudaloso arroyo que, según un productor agropecuario “era un gran recurso natural de agua para los animales”.
Se trata del arroyo Burgos, que atraviesa una gran cantidad de campos en la zona de María Grande Segundo. “Hasta hace un tiempo, se trataba de una fuente natural, donde los animales iban a tomar agua y ahora no tienen nada”, expresó un productor, Alberto Kelly, a Elonce al asegurar que “ahora el ganado se muere de sed o en el barro donde antes había agua”
“El arroyo es muy profundo en épocas normales puede llegar a medir 1,60 metros de altura y cuando había creciente hasta sobrepasaba el puente”, mencionó Kelly al recodar que hace algunos años “la creciente cortaba el camino”.
Kelly es un trabajador rural que siempre vivió en la zona y aseguró que nunca había visto algo semejante. “En 30 años al menos nunca se vio que la sequía perjudique todo. Antes las familias íbamos a pasar el día al arroyo, era un verdadero atractivo, pescabas, te refrescabas y pasábamos lindos momentos, ahora solo nos genera angustia y el panorama es desolador”, aseveró.
En esta misma línea, detalló que, por la sequía, “los animales se mueren de sed, no hay pasto para que coman y las altísimas temperaturas hacen que todo lo que crece se queme en cortos períodos de tiempo”.
“Atrás quedó el arroyo caudaloso, ahora solo hay sequía, tierra y aire caliente”, cerró.
(Fuente: elonce.com)
Se secó arroyo de Paraná Campaña y animales mueren de sed: “Una realidad amarga”
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Se trata del arroyo Burgos, ubicado entre la zona de María Grande Segundo y Mojones Sur. “Es un arroyo que siempre fue muy caudaloso, era una fuente natural para los animales, en 30 años nunca vimos algo así”, dijo un productor.
Maria Grande.
La escasez de lluvias que castiga a gran parte del territorio argentino, desde hace al menos dos años, se agravó en los últimos meses. En Entre Ríos la prolongada sequía, causa una innumerable cantidad de perjuicio al sector agrícola. Sembrados que se secaron por falta de precipitaciones, escasez de pasturas para los animales y falta de agua en cursos naturales.
En la zona de María Grande Segundo y Mojones Sur, en el departamento Paraná, se secó por completo un caudaloso arroyo que, según un productor agropecuario “era un gran recurso natural de agua para los animales”.
Se trata del arroyo Burgos, que atraviesa una gran cantidad de campos en la zona de María Grande Segundo. “Hasta hace un tiempo, se trataba de una fuente natural, donde los animales iban a tomar agua y ahora no tienen nada”, expresó un productor, Alberto Kelly, a Elonce al asegurar que “ahora el ganado se muere de sed o en el barro donde antes había agua”
“El arroyo es muy profundo en épocas normales puede llegar a medir 1,60 metros de altura y cuando había creciente hasta sobrepasaba el puente”, mencionó Kelly al recodar que hace algunos años “la creciente cortaba el camino”.
Kelly es un trabajador rural que siempre vivió en la zona y aseguró que nunca había visto algo semejante. “En 30 años al menos nunca se vio que la sequía perjudique todo. Antes las familias íbamos a pasar el día al arroyo, era un verdadero atractivo, pescabas, te refrescabas y pasábamos lindos momentos, ahora solo nos genera angustia y el panorama es desolador”, aseveró.
En esta misma línea, detalló que, por la sequía, “los animales se mueren de sed, no hay pasto para que coman y las altísimas temperaturas hacen que todo lo que crece se queme en cortos períodos de tiempo”.
“Atrás quedó el arroyo caudaloso, ahora solo hay sequía, tierra y aire caliente”, cerró.
(Fuente: elonce.com)